Hemos visitado la ciudad de Sibiu. Es una ciudad preciosa con murallas y torres de defensa que, a buen seguro, mejorará en cuanto lleguen más fondos europeos [se nota tanto lo restaurado de lo no que nos dijeron: "el dinero ha llegado hasta aquí"]. Hay como una línea a partir de la cual todo está sin pintar y deteriorado. Además del museo externo, existe el museo Bruckental. Debe su nombre al gobernador de Transilvania interesado en recopilar arte. No vale mucho, salvo algún cuadro de Eyck y varios de Brueghel. La "soviet" de una de las salas ha empezado a gritar cuando hemos entrado en ella. Tras nuestra sorpresa, el guía nos ha traducido [ya hablaré sobre quién habla idiomas aquí, que no son desde luego los que están en sitios oficiales] que tenía miedo a que el suelo cediera, así que hemos continuado la visita andando por los laterales de las salas. Sibiu es ahora capital de la cultura. Ahora que lo pienso, he estado en de vacaciones varias veces en capitales de la cultura. Una fue Glasgow hace siglos, pero estaba llena de actividad lúdico-cultural. Aquí el programa tiene 4 cosas. Llueve a ratos. En Plasencia dicen que hay 46 grados.
Lo no restaurado, lo restaurado y una toma de la plaza de Sibiu. El duende de las fotos siempre es el mismo.
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