Tras la primera jornada del Campamento Urbano Multideportivo, en el que hemos recordado a bastantes niños que tenían mochila, raqueta, bañador, zapatillas o camiseta, no dejo de pensar en las madres que andarán todo el día recogiendo las cosas de los "bichillos", tal vez incluso las cosas de otros "bichos" más grandes. No dejo de pensar en como se perpetúan los estereotipos, un niño olvidando "trastos" por todas partes y una "esclava" recogiéndolos. Lo pienso y lo pienso y creo que tal vez sea así, aunque quizás, pienso, esté equivocado. Al fin y al cabo suelo equivocarme con frecuencia.
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